Cuando un hijo deseado muere durante la gestación, el parto o postparto, este hecho trae consigo, más allá de la pérdida de la vida, un impacto emocional traumático para la mujer y la familia. Es un duelo tabú, silenciado y escasamente acompañado por el entorno social y sanitario.


Una atención deficiente durante el proceso de duelo perinatal puede ocasionar complicaciones posteriores y desencadenar la pérdida de la salud mental de los padres.


Según el DANE, ene Colombia, durante 2019 se registraron 37785 defunciones fetales y 4520 defunciones neonatal, es decir, 114 defunciones por día.


Los padres que sufren el duelo perinatal, en la mayoría de las ocasiones afrontan ese difícil momento sin que se les brinde acompañamiento emocional y son objeto de tratos deshumanizantes durante la atención hospitalaria, lo cual le suma más dolor a su experiencia de pérdida.


Todo esto debido a que en Colombia no existe un lineamiento de atención del duelo perinatal que brinde al personal de salud un estándar mínimo para el abordaje y acompañamiento de dichos casos y el personal de salud que tiene a cargo la atención en salud a la mujer y la familia carece de formación sobre el duelo perinatal.


El proyecto de Ley Brazos Vacíos surge con el propósito de asegurar una atención integral y cuidado de la salud mental de la mujer y la familia frente al duelo perinatal en instituciones de salud y de promover la formación de los profesionales en salud para brindar dicha atención, y declarar el 15 de octubre como Día Nacional de ella Concienciación de la Muerte Gestacional y Neonatal.


Esta iniciativa busca el apoyo de la ciudadanía para visibilizar y solucionar esta problemática y de esta manera, poder garantizar a todas las mujeres y familias que sufren el trágico suceso de la muerte de un bebé esperado, un acompañamiento adecuado que proteja su salud mental y sus derechos constitucionales.





WhatsApp chat